El sector inmobiliario se está recuperando, y cada vez es más común la compra de viviendas ya reformadas, por la comodidad de que puedes empezar a vivir en ella de forma inmediata y de ese modo se ahorran los dolores de cabeza que comporta una reforma.
Siempre hemos dicho que tener una buena primera impresión de una vivienda es crucial.
Por este motivo aparece este artículo, haciéndonos la pregunta de si es mejor reformar la vivienda antes de ponerla en el mercado, o no. La oferta de un inmueble de más calidad, puede superar a los inmuebles de características similares en el mercado, pero no siempre vale la pena ni es tan idílico.
Puede parecer que una reforma siempre renta cuándo no es así. Antes de lanzarte a reformar hay que tener en cuenta un par de factores: ¿tienes el dinero para hacerlo? Porqué si no es el caso, tendrás que pedir un crédito con unos intereses mínimos del 5% TAE, y igual ya no te valdrá la pena. La segunda cuestión que debemos plantearnos es ¿que aportará la reforma en la casa? Por ejemplo: lo que la gente suele buscar, o tener en cuanta a la hora de visitar o comprar una vivienda es la luz que tiene, si la cocina o los baños son amplios y están reformados, por lo que una reforma “low cost” en un baño si que valdría la pena, pero una reforma integral igual no. Para buscar la luminosidad de una vivienda deberíamos invertir en pintura y que nos la pintasen toda de blanco o con tonos claros.
Lo que está claro, que para darle valor a la vivienda se tienen que hacer los arreglos mínimos, cómo arreglar pequeñas averías, pintar y sanear paredes, cambiar la distribución buscando la amplitud (y si ya la tienes amplia ¡pues estupendo!) Y si dispones de algún espacio que no sirva para mucho y nuca supiste que hacer con el, pon un pare de baldas, un armario o una puerta y el almacenaje siempre vende, porqué siempre viene bien.
En cualquier caso, hemos concluido 3 ventajas que tendremos ala hora de vender una casa reformada.
Más valor.
El principal objetivo de cualquier vendedor es conseguir sacar el máximo beneficio a la venta de su vivienda. Rehabilitar la casa con lo básico puede aumentar el valor de tasación en un 10%, mientras que una reforma integral puede incrementar el valor de la vivienda entre un 15 y un 20%.
Las reformas más importantes que se realizan son:
- Suelos nuevos y paredes recién pintadas.
- Renovación de cocina y baño.
- Mejorar la eficiencia energética, invirtiendo en ventanas, aislamiento o cambiando el sistema de calefacción.
- Remodelar la vivienda con un estilo actual.
Más posibles compradores.
Otra de las principales ventajas de poner a la venta una casa reformada, es que aumenta el grupo de compradores en comparación a vender sin reformar. Esto se debe a que la reforma es un gasto de tiempo y de dinero, algo que muchos compradores no están dispuestos a aceptar.
Una vivienda reformada, en general, atrae más atención por lo que deriva en diferentes ofertas competitivas entre los compradores para cerrar la venta.
Venta más rápida.
El dueño de una vivienda quiere que ésta se venda lo más rápido posible. Una vivienda reformada suele adelantar todo el proceso.
La visión de una casa nueva y reformada hace que el comprador se imagine más fácilmente viviendo ahí. De otro modo, los posibles compradores tienen más dificultades a la hora de imaginarse si la casa se adaptará a sus necesidades o no en el futuro.